Los efectos de cambiarle las llantas, rines o ruedas a su carro

Cuando se es fanático del mundo automotor muy seguramente también se es fanático del "tuning" o de las modificaciones a los carros, y cuando a como dueño de algún carro quiere modificarlo muy seguramente lo primero que se le vendrá a la cabeza es cambiarle los rines para tener un mejor look. Uno pensará que este cambio será puramente estético pero en realidad al hacer esto hay implicaciones que van más allá de lo que aparece a primera vista, con la siguiente entrada explicaré los efectos positivos y negativos de esto. Antes de seguir debo hacer una precisión: a partir de aquí me refiero a "rines" como el aro que va dentro del neumatico, a "llantas" como el neumático y a "rueda" como el neumático con el aro puesto; es necesaria esta precisión porque esto conceptos varían según el país como por ejemplo en Argentina se le llama "llanta" a lo que en Colombia se llama "rin".

  

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Porsche 911 GT3

Cuando se cambia el rin lo más frecuente es optar por uno de mayor tamaño, esto da un mejor visual y los carros deportivos usan rines muy grandes pero no es por estética porque lo que se busca es por un lado albergar unos discos de freno inmensos y por otro hacer más efectiva su ventilación; por esta razón un Porsche 911 GT3 tiene unos rines de 20 pulgadas que albergan unos discos de freno con pinzas de 6 pistones que tienen un diámetro de 380 mm. Para hacer una comparación odiosa los discos de un Chevrolet Optra tienen un diámetro que no supera los 260 mm, estamos hablando de un carro que no tiene discos pequeños y que por lo menos tiene en sus 4 ruedas, muchos de los carros que se venden en nuestro país tienen tambores en el eje trasero y normalmente tienen un diámetro considerablemente inferior al de los discos sumado a que este mecanismo es menos resistente al calor.

Lo anterior no significa que nuestro carro económico tenga un mal frenado, lo que pasa es que normalmente tienen un peso que no demanda de gran poder frenante ni están hechos para que corran todos los días en pista, ni siquiera en carretera usaremos la totalidad de la capacidad de frenado de nuestro vehículo. Otra cuestión que hay que mirar es el tipo de material de los rines, si se desea optar por otros lo ideal sería que estos fueran hechos de una aleación ligera para reducir peso -aunque ni la más ligera de las aleaciones va a reducir el peso notablemente- pero muchos de los rines que elegimos son unos "cromados"; yo no soy ingeniero pero estoy seguro de dos cosas: una es que el metal brillante es el peor material para disipar calor y la otra es que es muy posible que ese brillante sea real sino un tratamiento barato. No sobra decir que cuando los frenos se calientan disminuyen su capacidad y otra cosa que vale la pena decir y que no es tan obvia es que los rines cromados sólo se ven las camionetas de los raperos/reggaetoneros, nunca en un carro pensado en tener un excelente desempeño como los preparados para competición.

Hablando de camionetas hay otro caso que vale la pena citar, el de las camionetas con rines gigantescos. Cuando se usan rines grandes por lo general se le tienen que calzar llantas de perfil bajo, a menor perfil y mayor ancho de las llantas mayor es el agarre que estas tendrán. Entonces ¿por qué los carros no vienen de fábrica con llantas anchas de perfil bajo?, sencillo, porque a menor perfil mayor posibilidad de romper un neumático con alguna imperfección de la carretera y también menor efectividad para amortiguar estas imperfecciones; es por esto que los vehículos que se han diseñado para ir fuera del asfalto se les equipa con llantas de perfiles altos. Es por esto que no es lo mejor ponerle rines inmensos a las camionetas mermando el perfil de las llantas porque el vehículo perderá su esencia.

Retomando la cuestión del material de los rines, tengo que decir por experiencia propia que los rines baratos son malos, el dueño anterior del carro que tengo se los cambió por unos que entre otras son bien feos, pues bien uno de estos tiene una avería insólita: está "poroseado" entonces hace que el aire se escape por ahí, de manera que hay que hacerle un arreglo artesanal tapando esta fuga pero mientras tanto me toca estar inflando las llantas con una frecuencia absurda. Así pues, como consejo digo que eviten este tipo de rines que son muy populares en los taxis, es poco probable que esta avería que yo tengo la tenga más gente con las ruedas de sus carros pero estoy seguro que es aún menos probable tenerla con los rines que traen los carros de fábrica.

El rin averiado

Afortunadamente los rines "aftermarket" que tengo en mi carro tienen la misma medida que los que traía de fabrica, esta medida calza unos neumáticos que son de lo más barato y más fácil de conseguir, si se cambia la medida casi que con seguridad habrá que conseguir llantas más caras; por esto se puede observar que un carro normal que usaba llantas Michelin, Goodyear o Bridgestone cuando el dueño le modifica el diámetro a los rines pasa a usar llantas Maxxis en el mejor de los casos. Así que los fabricantes no sólo piensan en costos en el momento de elegir un cierto tipo de ruedas para sus productos sino que también piensan en practicidad y adaptación a un medio.

Otro efecto que aparece al ponerle unas ruedas más grandes a un vehículo es alargar la relación final, cómo ahora la transmisión tiene que impulsar unas ruedas más grandes entonces habrá más esfuerzo de esta para moverlas, este efecto no es tan notorio pero existe y a mi modo de ver es negativo. Por otro lado el velocímetro de un carro está calibrado a la rotación de sus ruedas así que cambiándoles el tamaño este instrumento se descalibra, pero como el velocímetro tiene un margen de error a veces lo que se hace es compensarlo cuando se ponen ruedas más grandes.

Hasta ahora no hay mucha información respaldada con datos técnicos o experimentación sólo generalidades, así que a continuación les mostraré estudios hechos por la revista Car and Driver de Estados Unidos y por la revista Quatro Rodas de Brasil, ambos tomaron un determinado vehículo e hicieron mediciones de aceleración, frenado y otras pruebas dinámicas con el carro calzando distintas ruedas.

En su edición de Septiembre de 1996 Quatro Rodas publicó una respuesta a una pregunta que muchos de sus lectores hacían para su correo técnico, lo que se preguntaba con frecuencia era: ¿puedo cambiar las ruedas originales de mi carro?... Esto se respondió con mediciones técnicas, tomaron un Volkswagen Gol 1.8 e hicieron pruebas de aceleración, recuperación, adherencia, consumo y frenado tres veces, cada una con unos rines distintos.

El carro en pruebas

A priori mencionaban que el fabricante se declaraba en contra de cualquier modificación que se le hiciera al carro porque podían ir en detrimento de la duración de los componentes mecánicos del vehículo entre ellos los amortiguadores; aparte también se decía que con los neumáticos de mayor perfil ofrecían un mayor nivel de comodidad y menor resistencia para operar la dirección pero como contrapartida la adherencia era menor. Los rines originales del vehículo eran de 13 pulgadas de medidas 175/50, para este carro se ofrecían unos en opción de 14 pulgadas de medidas 185/60 y había un Gol GTI 16V que era el de mayor desempeño de la gama que calzaba unas llantas de medidas 195/60 Rin 15; estas fueron las probadas.

Resultados de la prueba, Revista Quatro Rodas Septiembre 96' Pg 90

Después de la prueba el punto de equilibrio lo tenían las llantas con rin de 14 pulgadas que se ofrecían en opción para el carro pero cuando este se le montaban las ruedas que usaba el GTI su rendimiento empeoraba en todo menos en frenado y adherencia lateral. La conclusión de este estudio la citaré textualmente: "...Más vale aprovechar el trabajo y la experiencia de los fabricantes... Es la mejor forma de disfrutar al máximo lo que cada modelo puede proporcionar". Así pues aunque se halla visto que posiblemente el carro mejore su rendimiento con otras ruedas lo que recomienda Quatro Rodas es no alterar el esfuerzo en investigación y desarrollo que cada fabricante hace antes de poner a rodar cualquier carro.

En Abril de 2010 Tony Quiroga publicó un articulo tratando este mismo tema para Car and Driver en Estados Unidos, como es usual en las buenas revistas se hizo investigación, en este caso tomaron un Volkswagen Golf 2.5 automático al que se le montaron llantas desde 15 hasta 19 pulgadas, las de 15 eran las que venían de serie con el carro y el resto eran unas "aftermarket" con rines de aluminio y llantas Goodyear Eagle GT de alto desempeño. A priori lo que mencionan es que a mayor tamaño de los rines mayor es el peso y que a mayor diámetro del rin menor el perfil de la llanta para mantener las ruedas dentro de su marco sin que golpee contra los guardafangos o los bomperes, para mantener calibrado el velocímetro y para mantener inalterados los engranajes con sus respectivas relaciones.

Resultados de la prueba, Car&Driver USA 2010

Después de hacer las mediciones con las pruebas dinámicas los resultados mostraron la tendencia descrita en esta entrada que es menor capacidad de aceleración pero más adherencia a medida que se aumenta el tamaño del rin, el equipo de Car and Driver hace énfasis en que esa tendencia se debe en gran parte al hecho de que rines más grandes implican más peso para mover. Sin embargo la sorpresa de esta prueba fue el hecho de que según las mediciones hay un límite para la afirmación "a menor perfil y más ancho en las llantas mayor adherencia" pues cuando el carro se probó con rines de 19 pulgadas no hubo mejores registros de frenado o adherencia lateral que cuando se probó con rines de 18 pulgadas.

Mi conclusión es parecida a la de Quatro Rodas, posiblemente cuando cambiemos los rines a nuestros carros lo que vamos a resultar consiguiendo es echar para atrás las decisiones que un equipo de ingenieros de primer nivel han tomado tras muchos análisis y pruebas. Lo mejor como con todos los componentes de los carros es no alterarlos, realmente no hay un gran beneficio haciéndolo pues habría que hacer pruebas tan detalladas como las de estas revistas especializadas para tomar una decisión.